¿Te sientes una farsa?
Me gustaría darte el número exacto de las veces que me mire al espejo llorando y que por mi cabeza pasaron pensamientos que me decían: “lo estoy haciendo todo mal”, “esto no es para mí”, “en cualquier momento me corren”... Pero la verdad no tengo la cifra.
He vivido con la noción de que “no soy suficiente” desde que tengo uso de razón… Pero entonces ¿qué? ¿Me dedico a victimizarme eternamente? ¿Me meto abajo de mi cama y me pongo a llorar por los siglos de los siglos…? ¿Vivo justificando mi falta de acción por el sentirme “insuficiente”?
Un día me cansé de vivir agobiada y harta de comparar mis capacidades con las de la persona de a lado y me pregunté objetivamente:
¿Cómo es posible que después de prepararme por años y estar haciendo actividades tan chingonas aún no me sienta suficiente, me de vergüenza aplaudir mis logros y no me crea capaz de lograr eso para lo que me he preparado años?
Y ese día más tarde, decidí aceptar lo que ya me había preguntado y le dije en voz alta a una amiga: “me siento la persona menos capaz de hacer algo trascendente” y PUM: no sé que me sorprendió más, si su cara de impresión de que por fin alguien la comprendía o su respuesta automática de: “estamos en las mismas” 💣💥
Ahí me cayó el veinte de que:
Tod@s tenemos una lista interminable de mentiras creadas por nuestra mente (y reforzadas por nuestra historia de vida) almacenadas dentro de nuestra cabeza y nuestro cuerpo, cuyo único objetivo es mantenernos “bien segur@s”, “quietesit@s”, inmóviles, sin correr riesgos, en una zona de confort que nos termina por ahogar y debilitar…
Entonces ¿vivimos en una enorme pandemia de personas que nos sentimos igual de fracasadas? Suena desmotivante, pero SÍ. Vivimos en una sociedad que enaltece el síndrome del impostor.
La sensación de no merecer el éxito ya logrado y que en cualquier momento seremos descubiertos como “farsantes”.
Y como eso me parece poco sustentable, me clavé y leí, investigué, escuché podcasts, vi documentales, pregunté y llegué a las siguientes conclusiones:
- 7 de cada 10 de personas viven con síndrome del impostor según un estudio realizado por la UNAM en 2022.
- Las mujeres viven envueltas en un síndrome del impostor aún más intenso y frecuente porque la sociedad nos exige el doble.
- Tenemos súper idealizada la “perfección” y nadie nos ha explicado porqué nos limita, en vez de impulsarnos.
- Romantizamos la auto-exigencia y la “disponibilidad 24 / 7”, sin preguntarnos antes cuál es nuestra definición de éxito.
Entonces básicamente: el sentirte “insuficiente” es algo que vive en el aire que respiras de la sociedad en la que existimos, le pasa a más personas de las que te podrías imaginar y es NORMAL sentirlo.
Peeeeero, no todo es tan gris chav@s: todo esto significa que está en tus manos desactivar esa sensación de sentirte “insuficiente”. Puedes salir de la mentira de sentirte una “farsa” por ti mism@, con el ejercicio de tu voluntad...
Por acá, te dejo las preguntas de Journaling que más me han ayudado a transformar creencias y a dejar de perder oportunidades por traer un chip equivocado de “insuficiencia” piloteando mi vida:
- ¿Qué es el éxito para mi y porque no me siento merecedor@ del mismo?
- ¿A quién quiero demostrarle que soy capaz y que no soy una farsa?
- ¿Por qué busco impresionar a otr@s antes de sentirme suficiente conmigo mism@?
- ¿De donde aprendí estas conductas y cómo puedo dejar de repetirlas?
Y seguramente después de responder estas preguntas, la sensación de “insuficiencia” o “síndrome del impostor” seguirá presente un rato más en tu vida (tampoco es magia y se requiere de mucho trabajo interno)… Pero te comparto lo que me hubiera encantado leer o escuchar cuando estos pensamientos se apoderaban de mí, quizás puedan servirte:
- No hay nada mal contigo, es tu cabeza queriéndote jugar chueco.
- No le debes perfección a NADIE.
- Auto-reclamarte y castigar-te, NO FUNCIONA DE NADA, te hunde en un ciclo vicioso.
- Aplaudir tus propios logros antes que otr@s lo hagan por ti es amor propio, no soberbia.
- Eres SUFICIENTE para ti y con que tú lo tengas claro como el agua, con eso BASTA.
Yyyyyyy el aprendizaje más importante en este proceso de creermela y continuar luchando contra mis demonios internos ha sido la frase:
¡SI NO FUERAS CAPAZ, NO TENDRÍAS LA OPORTUNIDAD…!
Lee esta frase cuantas veces creas necesario.
¡Déjame en comentarios qué opinas tú de este tema! Me encantaría leer tus experiencias.
- Hass de LMDC
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14 comentarios
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Justo el fin de semana pasado me metí en una competencia de CrossFit. Para comenzar que mi nivel no era ni cerca de los de mi equipo (aquí la farsante yo negándome que podía), luego era la mayor pero by far (51 años). Cuando salí a la competencia los comentaristas solo hablaban de mi elogiándo mi decisión de haberme metido, decían esta persona va a llegar a su casa y va a tener un cuento que contar). Al final del día mi hija de 17 años que asistió a verme con mi esposo me puso en su Snapchat muy orgullosa. Definitivamente la mente es muy fuerte y uno debe darse cuenta que si puede y que si no pudo se intento. Peor es no hacer nada.
Andrea peck el
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Hass wowww millones de gracias, yo creo que esa sensación de no sér suficiente de no ser exitosos, del miedo al éxito,de sentirnos que somos un fracaso.. viene de muchas generaciones atrás, son cosas que venimos trabajando por nuestros ancestros ya que que ellos no tuvieron todas estas herramientas de sanacion y trabajo personal, cuando lo hayamos logrado creo que sanamos a muchas personas. Un abrazo y gracias por compartir
Helen el